ToteBag

Los símbolos, rituales y esas cosas sencillas

que podemos hacer cada día,

nos traen de vuelta la parte mas ancestral de nuestra vida.

Hace unos años caminaba por las calles de Mataró,

en una buena compañía.

Nuestros pies nos guiaban hacia un concierto vespertino.

Ahora solo la situación me viene al recuerdo,

junto con la bolsa de tela que nos regalaron.

Me la traje como un tesoro,

consciente de que aquel paño color carne,

pesaba poco, menos de lo que hoy rememoro.

Mis sensaciones agarradas al pasado

me hacían sentirla con mayor gravedad.

Y las sensaciones son eso,

falsas realidades.

“ I Carry All My Traumas “

Rezaba en una de sus partes.

Provocador en esencia, la hice mía cada día,

colgándola de mi hombro.

Lo fenomenológico, está si estás.

Y tras quince años de trabajo interno,

me despedía hace unos días,

de varias escenas que como cicatrices abiertas,

sangraban de vez en cuando

con el paso de las lunas.

Es la noche, y el silencio

la que recuerda de donde vengo.

Las tiras desgatadas por el uso,

pedían a gritos, aceptaban su uso,

ser retiradas.

Más yo, me agarraba a su simbolismo.

Pero el día y la luz,

de la estrella de la mañana,

acercaron a mis manos un nuevo tejido,

con sus tiras y sus tintes.

“ Goizeko Izarra “

Reza ahora.

Gracias a una escucha activa,

estoy contigo, conmigo,

acompañándote en tu proceso.